¡Qué ambiente este viernes, qué ambiente! Desde que abrieron las puertas a las 15:00, los jugadores acudieron en masa al KinkyClub. El té de la tarde se anunciaba animado, ¡pero nunca lo imaginamos!
L y A se unieron a nosotros por primera vez. Una pareja muy acertada, completamente en sintonía en sus placeres compartidos y morbosos, participaron activamente en las conversaciones y contribuyeron al electrizante ambiente del Club.
M y su novio E también se unieron. Qué placer ver a una pareja Dominante/sumisa jugando sin restricciones y con tanto entusiasmo. M vestía un provocativo conjunto de corpiño y falda de vinilo que acentuaba sus curvas. Llevaba unos tacones altos muy sexys que resaltaban su espalda arqueada. M caminaba por el Club con su sumisa atada con correa, vestida con un sencillo body transparente y escotado. Su llegada encendió el ambiente, que de repente se convirtió en una llama. Tras una copa para disipar la incomodidad inicial de E, nuestros amigos subieron directamente a la planta superior para una sesión de azotes y varas. M, abierta y juguetona, dejó que algunos hombres solitarios, deseosos de ofrecer sus cuerpos para su abuso, probaran sus instrumentos.
L, por su parte, regresó al Club tras un largo periodo sin poder escaparse los viernes por la tarde. ¡Qué alegría verla tan dispuesta a jugar!
Poco después, llegaron Poulpy y L, acompañadas por Chok3 y seguidas de cerca por O. Se produjeron animadas discusiones entre el grupo, salpicadas de carcajadas y el inicio de planes maquiavélicos.
M y E continuaron con sus juegos, divertidas por los hombres a sus pies, quienes les impartieron un curso intensivo de ginarquía. C, una chica valiente, sumisa y muy guarrilla, pagó el precio, bajando del salón casi desnuda y despeinada tras haber subido con una camisa impecable…
De repente, se desató el infierno en el salón, donde Poulpy soportó las repetidas agresiones de O y Chok3 bajo la mirada cómplice y excitada de L y A. Se utilizaron numerosos instrumentos, y algunos más: una porra, una rueda afilada, un látigo de alambre de plástico y un látigo de cuero. Poulpy, a veces gritando, a veces gimiendo, se sonrojó y forcejeó bajo la lluvia de golpes de sus queridas amigas. E, la sádica dominante, y DirtyVonP subieron al salón para encargarse de L. Estaba reanudando el juego de impacto tras un largo periodo de inactividad, y menuda reanudación bajo los golpes y la dominación de nuestras compañeras, una con un látigo, la otra con una sola cola o una lengua de dragón. Cada una una nalga para reavivar en L las dulces alegrías del dolor y el placer.
Madame M y su amiga C llegaron, altivas y despampanantes con sus ropas de ciudad, listas para disfrutar de unas horas en el KinkyClub. Lil Devil se sentó a los pies de Madame M, quien aprovechó para agarrarle el pelo y el cuello, explicándole a su amiga, debutante, cómo funcionaban las cosas en su establecimiento.
Poulpy soportó los impactos y golpes cada vez más frenéticos de sus amigas, quienes se volvían cada vez más maquiavélicas. El clímax fue cuando O usó una almohaza metálica, que cubrió las nalgas de Poulpy con un líquido granate… Tener un culo ensangrentado es un placer que disfrutan algunos, pero a menudo insoportable para otros. Las fotos están aquí…
DirtyVonP, al ver a H, nuestro entusiasta de la TCC, con aspecto algo solitario, le ordenó a Lil Devil que jugara con él y le diera su primera sesión de dominación. Inicialmente avergonzada y temerosa, la joven rápidamente se atrevió y, sujetándole firmemente los testículos y el pene con una cuerda, lo azotó repetidamente hasta que alcanzó el orgasmo.
DirtyVonp hizo que L y Lil Devil se arrodillaran uno junto al otro en el banco de azotes. Cubriendo sus nalgas, comenzó a azotarlas con una fusta bajo la atenta y ansiosa mirada de C, quien no se perdía nada, encantada de ver esas jóvenes nalgas rayadas con la vara. A continuación, los pechos de las dos chicas sintieron toda la fuerza de la fusta de DirtyVonp, cada una gimiendo por turnos mientras se ofrecía al máximo.
Una tarde verdaderamente sublime donde todos los presentes nos brindaron el placer de jugar sin límites ni restricciones. ¡Gracias a todos!
